La reducción de la brecha digital trae aparejada una serie de puntos importantes a tener en cuenta por los diferentes gobiernos de la región. Entre ellas, la exposición de menores a diferentes contenidos que pueden herir su sensibilidad, o incluso a caer en redes de contenido para adultos o de imágenes impropias de menores, por ello es importante que se tomen las medidas necesarias para evitarlo.
Una de las primeras medidas para combatir este tipo de problemas es la realización de un diagnóstico que permita conocer el alcance de los jóvenes y niños a Internet, así como también si son conscientes de los peligros que supone su uso no responsable. En ese sentido, en Paraguay, UNICEF, en alianza con la ONG Global Infancia, Enfoque Territorial y Secretaría Nacional de Tecnologías de la Información y la comunicación (SENATICS), llevaron adelante en el año 2016 un sondeo a adolescentes sobre situaciones de explotación sexual a través de las tecnologías.
Para evaluar esos comportamientos se realizó una encuesta con 1.076 adolescentes de entre 11 y 17 años. Estos jóvenes pertenecían a 20 instituciones educativas de Cordillera, Central, Capital y Caaguazú.
Entre los resultados que arrojó el sondeo se destaca que el 76% de los niños accede a Internet todos o casi todos los días. De la misma manera, el 87% de los jóvenes accede a la red por medio de su propio celular, mientras que el 76% de ellos chatea a través de WhatsApp, Line, Telegram u otra aplicación cuando usa el celular.
La encuesta también marca que el 64% de los jóvenes recibieron alguna vez contenidos pornográficos a través de WhatsApp, sin buscarlos ni solicitarlos. En tanto que el 71% considera que sería muy grave que una foto personal con contenido sexual de ellos recorra las redes, por lo que recurriría a sus padres si ocurriese una situación desagradable en las redes.
Por otra parte, la encuesta sirvió para conocer que 2 de 10 adolescentes se contactó con un extraño en las redes sociales. Mientras que 6 de cada 10 explicaron que llegaron a encontrarse con un extraño que conocieron en las redes sociales y, en realidad, se trató de una persona que no era quien dijo ser.
Al respecto es importante destacar que en el 18% de los casos de estos encuentros, la persona que mintió su identidad en las redes sociales era un adulto que se hizo pasar por un adolescente. Mientras que el 14% de estos chicos, que accedieron a encontrarse con un desconocido al que contactaron a través de Internet o redes, dijeron haber sido víctimas de algún tipo de abuso.
De acuerdo con las conclusiones a las que UNICEF llega después de realizar la encuesta es mejor educar que prohibir. Para ello el organismo desplegó la campaña #LoDigitalEsReal, con el fin de concientizar a los niños y las familias sobre el uso de las nuevas tecnologías y las amenazas que ellas conllevan. El objetivo es educar a los padres para que puedan acompañar a sus hijos al momento de ingresar a Internet y hacer uso de las redes sociales.
El informe destaca que muchas veces, para los adolescentes, no existe una clara línea divisoria entre lo real y lo virtual. Remarca que generalmente confunden a los contactos con amistades reales, lo que los expone a aspectos compartir aspectos de su vida privada por las redes sin terminar de medir el verdadero impacto que pueden tener en su vida real.
La iniciativa que lleva adelante UNICEF es importante desde el punto de vista de las familias, niños y adolescentes que tienen acceso a banda ancha, para poder prevenir cualquier peligro que afronten ante su uso indebido. Es importante también que tanto el Estado, como la industria, apoyen este tipo de iniciativas generando conciencia en los habitantes.
Este tipo de iniciativas son necesarias para que exista un adecuado uso de la red, previniendo cualquier inconveniente que puedan tener los adolescentes y los niños. Se trata de un trabajo fundamental para contener a la porción de la población que tiene acceso a la red, aunque dese el gobierno también se tienen que generar las condiciones necesarias para poder incluir al resto de los ciudadanos.
Para alcanzar esas metas, es fundamental que las autoridades desplieguen estrategias para mejorar las condiciones de desarrollo de los servicios de banda ancha, en particular los móviles. Así las cosas, es necesario que se contemple una política de asignación de espectro que permita a la industria la planificación adecuada para poder desarrollar este tipo de redes. También cobran importancia las reducciones de las trabas burocráticas para el despliegue de redes de telecomunicaciones.
Las iniciativas destinadas a generar una conciencia de utilización de Internet y redes sociales son positivas en tanto busquen reducir los riesgos de niños y adolescentes. Mejorar las opciones de seguridad para este grupo de la sociedad es importante, como también lo es generar condiciones de acceso para los habitantes que por diferentes motivos aún no pueden utilizar el servicio.