Productores rurales de Brasil utilizan mayormente tecnología móvil

El aprovechamiento de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) permite potenciar a diferentes sectores de la economía. La agricultura no es ajena a esa situación, existen múltiples aplicaciones tecnológicas que posibilitan su desarrollo y mejora en la productividad para esta actividad que es de las más importantes en América Latina.

En ese sentido, de acuerdo con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento de Brasil, señala que el 94% de los productores del sector poseen teléfonos móviles. La cartera destaca que de ese total el 68% utilizan smartphones para comunicarse.

Sin embargo, de acuerdo con un estudio del ministerio junto con la Esalq (Escuela Superior de Agricultura Luis Queiroz) de la USP, apenas el 23% del territorio brasileño agrícola cuenta con algún nivel de conectividad mediante redes 2G, 3G, 4G o 5G.

Si bien, de acuerdo con Anatel, el 89,2% de la población de Brasil cuenta con acceso a 4G, está distribución no es uniforme entre las 12.000 localidades que disponen de cobertura de servicios móviles. En ese sentido la agencia reguladora planea utilizar la banda de espectro de 700 MHz para llevar conectividad a las zonas rurales y de esa manera beneficiar a los trabajadores de este sector.

Con el desarrollo de 5G se espera brindar una mayor cantidad de herramientas de conectividad al sector, ya que estas nuevas redes están diseñadas para atender una mayor densidad de conexiones en el orden de más de 1 millón de dispositivos conectados por kilómetro cuadrado. Estas nuevas capacidades de las redes 5G permitirían el desarrollo del Internet de las Cosas (IoT) en actividades productivas.

Según el Ministerio de Agricultura de Brasil, un aumento en el 25% de la conectividad en el campo demandaría, en el transcurso de dos años, la instalación de 4.400 torres. Esta inversión redundaría en un aumento de cerda del 6,3% del valor bruto de la producción agropecuaria del país. En tanto que aumentar la conectividad en un 80% o 90% obligaría a la industria a desplegar 15.800 torres, y potenciaría en un 10,2% la producción agrícola local.

En este sentido, la incorporación de redes 4G y 5G se presenta como un factor para el crecimiento al sector. La incorporación de diferentes sensores relacionados con la actividad mejoraría los niveles productivos optimizando los recursos que necesita la agricultura en Brasil. Este desarrollo permitirá a la industria mejorar su productividad y alcanzar mayor desarrollo, lo que se traducirá en mayor crecimiento de la economía y la posibilidad de crecer en el mercado global.

Para potenciar todas estas posibilidades es fundamental que existan políticas que apoyen el desarrollo de redes de telecomunicaciones en las zonas rurales y remotas, como los planes buscan reducir las trabas burocráticas en autorizaciones de infraestructura de red. En ese sentido, la existencia de una norma modelo para los diferentes municipios, tal cual existe en Brasil, es importante para incentivar el desarrollo de redes.

Por otra parte, es necesario que las autoridades de Brasil pongan a disposición de la industria de telecomunicaciones mayores porciones de espectro radioeléctrico. En particular con la generación de agendas que permita a los operadores previsibilidad sobre las futuras licitaciones, lo que les permita planificar de forma más eficiente el desarrollo de las redes.

En resumen, la adopción de servicios móviles por una porción importante de los productores agrícolas de Brasil es importante para el avance del sector. Sin embargo, deben existir esfuerzos conjuntos con las autoridades para estimular la adopción de servicios móviles para de esa manera mejorar las condiciones productivas del sector.