México trabaja para generar ambientes digitales seguros en los colegios

Las clases virtuales se implementaron en muchos países de América Latina con el objetivo de reducir la circulación de la población por la pandemia de Covid-19 y mantener algunas actividades esenciales a distancia, como la educación. El acceso a Internet por parte de los colegios y alumnos se transformó así en una necesidad prioritaria para sostener la continuidad pedagógica.

Junto con el acceso a banda ancha para que los alumnos puedan acceder a sus clases, se generaron una serie de problemáticas asociadas, relacionadas principalmente con el contenido al que accedían los niños y la seguridad de los sitios que navegaban. En este marco, la Secretaría de Educación Pública (SEP) de México trabajó en promover acciones para el uso seguro de Internet y los dispositivos de telecomunicaciones.

Para alcanzar ese objetivo la SEP impulsa a los alumnos del Sistema Educativo Nacional a que se formen en ambientes digitales sin peligro, con seguridad y con la oportunidad de poder alcanzar las mejores experiencias educativas. Desde la cartera se emiten de forma constante recomendaciones para que funcionarios, docentes, alumnas y alumnos, madres, padres de familia y tutores, desarrollen un sentido de ciudadanía digital responsable, a través de la Dirección General de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (DGTIC) de la dependencia.

Estas recomendaciones se incrementaron a partir del aumento de la cantidad de horas en línea que pasan los estudiantes a partir de la pandemia. Por ese motivo aumentaron la cantidad de recomendaciones que existen en torno a la ciberseguridad. Estas acciones son fundamentales para generar en los jóvenes la conciencia necesaria para transformarlos en ciudadanos digitales.

En ese sentido se desarrollaron las jornadas para un Internet seguro donde se busca inculcar valores fundamentales en el ámbito digital. Entre ellos se destaca la protección de datos personales; la dispersión de información en redes sociales; la cautela en el acceso a enlaces desconocidos o riesgosos, y la actualización de dispositivos y software.

Esta campaña tiene dos objetivos: concientizar sobre los riesgos que tienen los usuarios de Internet en general al utilizar distintas aplicaciones (redes sociales, mensajería) y, por otro lado, consolidad una cultura de prevención en la seguridad digital.

En ese sentido se trabaja en educar a los jóvenes sobre la importancia de proteger las redes sociales, tener cautela con los enlaces recibidos y mantener actualizados los equipos, y proporcionar solamente los datos necesarios. Este tipo de iniciativas es importante para mejorar las condiciones educativas en el país, sobre todo cuando estas se realizan a distancia. Es deseable que estas acciones estén acompañadas por políticas que busquen aumentar el acceso a banda ancha de la población.

En otras palabras, es necesario que se busquen estrategias para aumentar el acceso a la banda ancha en la población que luego contribuyan a una mejora de condiciones para la teleeducación. En particular es necesario impulsar tecnologías de banda ancha móvil, como LTE y 5G, que por sus características tienen mayor penetración en las zonas suburbanas y alejadas de las grandes ciudades con respecto a tecnologías de acceso alámbrico.

En este marco, cobran importancia las políticas que permitan a los operadores de telecomunicaciones acceder a mayores porciones de espectro radioeléctrico y la generación de una agenda que posibilite a la industria planificar de forma más eficiente el tendido de redes de nuevas tecnologías. En el mismo sentido, es importante que las autoridades reduzcan las trabas burocráticas que existan al momento de desplegar estas redes, generando mayores habilitadores para el desarrollo de infraestructura.

Así las cosas, la iniciativa de mejorar la seguridad en las clases virtuales es positiva para potenciar la educación a distancia. Sin embargo, esta estrategia debe ser acompañada por políticas que busquen mejorar difundir el acceso a la banda ancha entre la población.