Entrevista a Sebastián Cabello, Director de GSMA en América Latina, Parte I
La conectividad es uno de los pasos necesarios para aumentar la influencia de las Tecnologías de la Información y la comunicación (TIC) en las economías de los países. Los servicios móviles conforman una oportunidad para conectar a los individuos, en particular en los mercados de América Latina.
Sobre la importancia de cerrar la brecha digital, Brecha Cero dialogó con Sebastián Cabello, Director de la oficina regional de GSMA en América Latina. La GSMA representa los intereses de los operadores móviles de todo el mundo y está integrada por casi 800 operadores y más de 300 empresas en el ecosistema móvil más amplio. Asimismo desarrolla eventos en la industria como el Mobile World Congress, Mobile World Congress Shanghai, Mobile World Congress Americas y Mobile 360 Series.
Sebastián trabaja en GSMA desde 2006 en temas de banda ancha móvil y espectro en países en desarrollo, basado en Latinoamérica. Antes de unirse a la GSMA, trabajó como consultor en organizaciones internacionales públicas y privadas. En su formación académica sobresale su Masters en Relaciones Internacionales de la Universidad de California, San Diego (UCSD), y una licenciatura en Economía de la Universidad Nacional del Sur (Argentina).
A continuación la primera parte del diálogo de Brecha Cero con Sebastián Cabello:
Brecha Cero: ¿De qué manera las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) influyen en el desarrollo de los diferentes mercados de la región? ¿De qué forma la reducción de la brecha digital permite el desarrollo socioeconómico?
Sebastián Cabello: La digitalización de los países primero ayuda fomentando la inclusión social. Hoy hay una brecha entre los que están conectados y los que no lo están, y aquellos que hoy están conectados pueden ser más productivos en sus trabajos, pueden tener mejores salarios, estas más capacitados, entonces es un elemento que los potencia en su actividad normal. Hoy eso es un elemento, en el cual todo el mundo reconoce como algo clave para el desarrollo de los países, de hecho las Naciones Unidas han puesto al acceso a Internet como un derecho.
La conectividad es fundamental para el desarrollo de los países porque hace a los ciudadanos y las empresas más productivos. Hoy se habla de conectar a las personas, pero si bien ya se superó el 100% de penetración de conexiones, se está llegando también a un 100% de penetración de suscriptores. Es una diferencia que nosotros también medimos en GSMA, las conexiones es un número que contiene a las personas tienen más de un dispositivos y a las cosas que están conectadas. Entonces el número de chips, de conexiones, ya no es tan significativo, por ejemplo Argentina tiene el 140% de penetración de conexiones, pero tiene el 90% de suscriptores. Esa es la real brecha que todavía falta conocer en lo que hace a lo móvil.
Los servicios móviles son la punta de lanza de lo digital. Desde 2011 que la banda ancha móvil superó a la banda ancha fija, el móvil es el medio principal por el cual la gente accede a Internet y es también el medio principal a través del cual se puede cerrar esa brecha.
Entonces cerrar la brecha digital permite igualar oportunidades entre todos los ciudadanos. Porque si ya hay brecha de ingreso, brecha de educación, para aquellos que accedan o no a lo digital va a ser todavía más ostensible la brecha. Así lo digital primero es fundamental para reducir la brecha que ya hay: de ingresos, social, socieconómica, y al mismo tiempo es igualador de oportunidades. Y eso obviamente impacta en el desarrollo socieconómico, porque las personas conectadas son más productivas pueden acceder a mejor salario.
Brecha Cero: ¿Cuáles estrategias son necesarias para reducir la brecha digital en un país? ¿Qué medidas regulatorias son necesarias para que se logre aumentar la conectividad?
Sebastián Cabello: Los países tienen que trabajar primero en un dialogo directo con el sector privado y entender que cosas es deseable que haga el sector público y cuales el privado. En lo posible crear en el mercado un ecosistema y negocios que sean sostenibles, para que la inversión y lo que promueva la conectividad sea el sector privado. Mientras que el Estado debería intervenir en aquellos lugares donde eso no es posible: “el mercado hasta donde sea posible, el Estado hasta donde sea necesario”.
Y en este caso, el Estado tiene que tener un buen relevamiento en donde debería intervenir y que cosas debe hacer. O sea hay que tener un buen diagnóstico, es importante evitar esfuerzos superpuestos, porque todos los ministerios quieren integrar sur propios emprendimientos, entonces hay que ordenar todos los programas y estar orientados en lo que son fines y medios. Tener en claro donde el Estado puede hacer y tratar de estar bien estimulado en donde el sector privado lo puede hacer. Sino se corre el riesgo que el Estado haga un efecto crowding out (expulsar la inversión privada) y eso es muy malo porque al fin y al cabo está invirtiendo en lugares que no son necesarios, donde un privado podría invertir. Si debe invertir, o generar incentivos, en aquellos lugares donde el privado no tiene incentivos para invertir, donde no es rentable.
En cuanto a las medidas regulatorias si bien son bastantes amplias, existen algunas concretas como el manejo del espectro radioeléctrico, que es fundamental para promover mayor cobertura e incluso para promover mayor competencia. Ya que de ese modo se otorgan más licencias para prestar servicios que permite más competencia. Y para alcanzar más la cobertura es fundamental que se entregue espectro.
Otra medida puede ser estableciendo permisos a través del despliegue de infraestructura, aunque eso se maneja más en el orden municipal. Pero también se pueden generar incentivos: para aquellos que compartan infraestructura exenciones impositivas, facilitando el acceso a edificios públicos. También se debe trabajar inteligentemente con el fondo de servicio universal, los países suelen primero recaudarlo y luego no saben cómo utilizarlo, no tienen un modelo claro para su aplicación. Eso también tiene que tener un modelo claro de uso, para saber qué hacer con lo que se recauda.
Después hay dos puntos más a tener en cuenta que son del lado de la demanda. Uno es trabajar en la educación del desarrollo de las habilidades digitales, mucha gente no usa internet, una computador o teléfono inteligente porque no sabe cómo utilizarlo. Y el otro es en el estimular contenido locales, que es lo que haría que una persona en una comunidad se quiera conectar. Por eso el contenido local es clave.
Brecha Cero: ¿Cuánto aportan las tecnologías inalámbricas para mejorar la conectividad de los diferentes países?
Sebastián Cabello: la penetración de Internet móvil a fines del 2016 era del 51 por ciento, y hoy están llegando al 60 por ciento las conexiones de Internet móvil, estimamos que para 2020 vamos a llegar al 63%. La adopción de teléfonos inteligentes que hoy es del 60% va a llegar al 70% para 2020 según nuestras estimaciones.
También hay que considerar el aporte de la industria móvil al PBI, que contribuye al 5% del producto bruto regional, es decir US$ 260.000 millones en 2016. Y esperamos que llegue a US$ 320.000 millones, es decir 5,6 del PBI en 2020. Así se refleja en nuestro reporte “La economía móvil de América Latina”.