Las TIC una de las herramientas de los gobiernos de América Latina para enfrentar al COVID- 19

La incorporación de tecnología de la información y la comunicación (TIC) dentro del sector de la salud es una medida que fue tomada en los distintos países de América Latina en diferentes niveles de adopción y éxito. La actual crisis pandémica del virus COVID-19 es una prueba para la reacción preventiva de la mayoría de las naciones de la región, donde la tecnología puede ayudar en iniciativas de control y salud durante la contingencia sanitaria.

Algunos de los gobiernos de América Latina comenzaron a desarrollar diferentes iniciativas relacionadas con las TIC para poder afrontar esta pandemia. En general se trató de distintas aplicaciones que buscan informar, concientizar y ayudar a la población en todo lo que refiere al COVID-19. De esta manera, las aplicaciones  cumplen un rol fundamental en la prevención de la enfermedad: el aislamiento social y reducir la propagación del virus.

En ese sentido, el gobierno de Colombia desarrolló una aplicación denominada “CoronApp” disponible en los sistemas iOS y Android, con el objetivo de brindarles soporte a los ciudadanos sobre el virus.  La app obliga al usuario a registrar sus datos personales, y una vez creado un perfil comienza a realizar preguntas sobre el estado de salud. La aplicación cuenta con noticias recientes del  Instituto Nacional de Salud (INS) y recibir consejos sobre prevención, también información puntual sobre la enfermedad, síntomas y tratamiento.

En Argentina, la Secretaría de Innovación Pública que junto con el ministerio de Salud y desarrolladores de Presidencia, Jefatura de Gabinete, trabajaron en la creación de la Aplicación Coronavirus Argentina, con el fin de mantener informada a la población sobre los síntomas, su prevención y detección en caso de sospecha e infección. El objetivo es que cuente con un mapa con las unidades de salud cercanas y las últimas novedades oficiales por parte del Ministerio de Salud. Al mismo tiempo se comenzó a organizar reuniones con distintas carteras y  operadores,  para desplegar iniciativa que favorezcan el funcionamiento del trabajo domiciliario, clases virtuales y consultas de salud.

Otro de las facilidades que las TIC pueden ofrecer a las distintas administraciones es al momento de enfrentar estados de cuarentena. En  el Perú implementó un acceso para que los ciudadanos puedan registrar su solicitud para transitar libremente durante la cuarentena. El gobierno de ese país dictaminó  el estado de emergencia y aislamiento social obligatorio decretado por el Ejecutivo durante 15 días para frenar el avance del coronavirus (COVID-19). Los ciudadanos que quieran registrase deberán volcar sus datos personales en la plataforma del gobierno pudiendo transitar sólo si es necesarios y con las condiciones impuestas por el gobierno.

En Ecuador, en tanto, las autoridades acordaron con los operadores de telecomunicaciones aumentar los datos otorgados a los usuarios de servicios móviles, así como ampliar el ancho de banda de los accesos fijos, sin costos extras. El objetivo de la medida es mejorar las condiciones de vida de los pobladores mientras permanecen en sus casas.

Sin embargo, es menester que la mayoría de los mercados de la región trabajen también en la creación de condiciones para mejorar la conectividad del mercado. Las opciones para que estas estrategias funcionen dependen en gran parte de las condiciones de acceso a la banda ancha de la población. En otras palabras, haber desarrollado políticas que mejoren la conectividad de banda ancha brinda a ciertos mercados una ventaja considerable en estas situaciones críticas.

En ese sentido, cobra importancia la mayor disponibilidad de espectro radioeléctrico para el desarrollo de la banda ancha móvil. Principalmente para el desarrollo de tecnologías robustas como LTE y 5G. También es importante que se generen políticas que faciliten el tendido de redes de telecomunicaciones y la reducción impositiva en el sector.

Como se aprecia, varios mercados de la región reaccionaron de forma rápida a la nueva pandemia, con política transversales que buscan atacar de raíz el problema. Aunque es importante que existan estrategias a largo plazo que posibiliten que estos mercados estén preparados de forma más eficiente para este tipo de crisis.