El Salvador comparte experiencias del programa Enlaces con la Educación con América Central

El desarrollo de un entorno digital que permita a los países incursionar en el nuevo escenario económico global es un trabajo que deben llevar adelante las autoridades en diferentes sectores. Desde los procesos de producción del sector privado, pasando por la salud, el propio gobierno hasta la educación debe estar alineados en la búsqueda de aumentar la digitalización de sus tareas cotidianas.

Así mismo, el trabajo colaborativo es otro de los objetivos que deben perseguir las autoridades de los diferentes países para poder entender la lógica digital. En ese sentido, El Salvador avanzó al momento de compartir con otras autoridades de América Central las experiencias del programa Enlaces con la Educación.

Por medio del Ministerio de Educación de El Salvador, se participó a otras carteras de este sector de América Central que integran el Sistema de Integración Centroamericana (SICA) los principales puntos del proyecto salvadoreño. La compartición de información tuvo lugar en la 46ª Reunión Ordinaria del Consejo de Ministros de Educación y de Cultura de la CECC/SICA.

Por medio del programa Enlaces con la Educación, El Salvador busca que cada niño y niña que están en las aulas del sector público pueda tener un dispositivo electrónico para acompañar su aprendizaje. La distribución de estos equipos para este año marcha de forma acelerada para lograr que el 100 % de estudiantes de primero a tercer grado cuenten con sus tablets, y los de cuarto grado hasta bachillerato con laptops.

Estos equipos se entregan a través del programa Enlaces con la Educación cuentan con un paquete gratuito de internet. De esta forma cada alumno puede elegir que operador móvil le brinda el beneficio que posibilita el acceso a más de una decena de aplicaciones con contenidos educativos.

El programa también cuenta con la posibilidad de distribuir computadoras adaptadas para estudiantes con discapacidad. De esta manera busca que la política pública tenga un carácter igualitario y equitativo.  La posibilidad de compartir esta experiencia con otros países de América latina es una estrategia positiva para la región, para que otros mercados puedan tomar los puntos más importantes y adaptarlos a su realidad.

El proyecto de El Salvador sigue la lógica de muchos países a nivel global que buscan aumentar la digitalización en la población. Sin embargo, deben estar acompañados por otras estrategias que tiendan a aumentar el acceso a banda ancha en la mayoría de la población, ya que es fundamental que los estudiantes puedan continuar su experiencia por fuera del ámbito educativo.

Para alcanzar estas metas las tecnologías de banda ancha móvil, particularmente LTE y 5G, se presentan como las más aptas para desplegar accesos en zonas rurales y alejadas de los grandes centros urbanos. Para ello es fundamental que las autoridades desplieguen estrategias que estimulen el desarrollo de estas tecnologías a la industria de telecomunicaciones.

La generación de iniciativas que posibiliten a la industria contar con mayores porciones de espectro radioeléctrico es una medida a considerar. Así como también la generación de una agenda que posibilite a los operadores planificar de forma eficiente el tendido de redes de nuevas tecnologías de acceso a banda ancha móvil.

En el mismo sentido, es necesario que se reduzcan las trabas burocráticas que pesan sobre la industria al momento de desplegar nuevas redes de telecomunicaciones. Políticas como una única norma que aglutine las demandas del Estado, y la generación del concepto de ventanilla única de tramites se vuelven fundamentales en este camino.

Como se puede apreciar la puesta en común de la experiencia de los proyectos de digitalización del sector educativo por parte de las autoridades de El Salvador es importante para el resto de los países de la región. Pero internamente debe ir acompañado por otras iniciativas que busquen aumentar el acceso a banda ancha móvil en el mercado.